Fernando Gallardo: Una casita de muñecas primorosamente servida por Mariano Martín de Cáceres y María José Zandundo. Si dices que vas de mi parte, te llevarás un recuerdo inolvidable.
Fernando Gallardo: Parece que ha habido un terremoto y que el hotel haya quedado parcialmente destruido. Pero no, es el capricho del arquitecto, que lo diseñó así, no se sabe aún por qué. Lo mejor es su cocina. Y bodega